El salón de la casa es una de las estancias más importantes y protagónicas en términos decorativos. No solo porque suele ser la habitación más amplia, sino porque reúne a la familia y los amigos, además de entregarnos un lugar para descansar y disfrutar del ocio. En este sentido, nada mejor que aplicar una decoración cálida. Para conseguirlo, los tonos tierra son nuestros candidatos favoritos.
Los tonos tierra están marcando tendencia en el mundo del interiorismo. Lo que, sin duda, es un reflejo de nuestra búsqueda de calma en medio de una vida ajetreada y acelerada. Esta gama cromática se inspira en paisajes serenos y materiales orgánicos, invitándonos a crear espacios tranquilos y equilibrados.
No es casual que Pantone haya elegido al Mocha Mousse como color del año 2025, un marrón suave que refuerza la tendencia hacia tonalidades cálidas y naturales. Esto se debe a que los tonos tierra nos envuelven de una sensación serena, ideal para decorar áreas como el salón o el dormitorio.
Este es el punto de partida para obtener un bonito salón en tonos tierra. Para decorar las paredes, deberíamos escoger tonalidades suaves que serán la base del resto de la decoración. De esta forma, se aporta luminosidad y serenidad a todo el conjunto. Colores como el beige, el arena o incluso un blanco roto, crean una atmósfera neutra que amplía visualmente el espacio.
Si lo que se busca es profundidad y personalidad, una pared de acento en terracota o marrón oscuro puede ser el toque distintivo. Esta opción solo es viable si el salón recibe luz natural. De lo contrario, pintar una pared de acento en un tono terroso podría estrechar u oscurecer la habitación.
Los materiales son clave para conseguir una decoración en tonos tierra. Afortunadamente, estos colores están presentes en varios materiales naturales como la madera, el yute o el ratán. Las fibras naturales crean una agradable sensación de calidez y autenticidad que se refuerza con otros elementos. Combina con piezas de mármol, cerámica y textiles de suaves texturas.
Y hablando de textiles, estos son esenciales para conseguir una atmósfera acogedora. Y si queremos un salón en tonos tierra, contar con mantas, plaids, cojines y alfombras es clave para crear capas de profundidad. Incorpora alfombras de yute, cortinas de lino y cojines en tonos ocre o terracota para enriquecer el estilismo.
Independientemente de los colores que elijas para decorar tu salón, la iluminación siempre será fundamental. Sin embargo, si quieres una paleta cromática de tonos terrosos, esta es aún más importante, ya que refuerza la calidez y el carácter acogedor del espacio. Para regular la entrada de luz natural, prefiere cortinas suaves en tonos arena o beige. En el caso de la luz artificial, crea capas de iluminación. Puedes colocar una lámpara de pie al lado del sofá, algunos apliques en el pasillo y una lámpara de mesa sobre el aparador.
La clave está en escoger bombillas de luz cálida y pantallas en tonos tierra. Aquellas de materiales naturales son ideales. Por ejemplo, una lámpara de mesa con una base cerámica y una pantalla de ratán o una lámpara de techo con bambú y tela.
Aunque el estilo rústico es ideal para aplicar tonos tierra en la decoración del salón, no es el único con el que puedes jugar. Esta paleta se adapta a cualquier tipo de interiorismo. Puedes diseñar un salón mediterráneo con una base blanca y acentos en terracota, mostaza y accesorios de yute o ratán.
El estilo bohemio también es ideal para aplicar estos colores. Integra varias capas de textiles, alfombras con patrones étnicos y detalles decorativos en verde y ocre. Incluso, puedes aplicar estos tonos en espacios más minimalistas. Elige pocos accesorios, pero con mucho detalle. Un sofá de líneas suaves en blanco roto, decorado con algunos cojines en tonos beige, es ideal para un diseño minimalista muy sereno.