La primera propuesta llena la terraza de este bonito jardín de muchos elementos de madera. Este material, predominante en el suelo y en gran parte del mobiliario, aporta mucha calidez y continuidad, estableciendo una conexión fluida con la naturaleza que le rodea.
El espacio está dividido en dos partes, una zona de salón y otra de comedor. La zona de descanso destaca por un precioso sofá en forma de L, que delimita este espacio con el comedor. Se trata de un sofá rinconero con capacidad para cinco personas, con base de madera maciza de acacia y acabado en cuerda trenzada. Un sofá en tono gris claro, que se combina con numerosos cojines en tonalidades beige, grises y verdes muy suaves, que aportan al espacio un estilo muy relajado y elegante.
Esta zona está delimitada por una bonita alfombra exterior en tono claro, sobre la que se ha situado una mesa de centro, también en madera maciza de acacia, sobre la que se ha colocado, a modo decorativo, un bonito jarrón con flores secas.
En la zona del comedor, se ha optado por muebles de líneas simples y funcionales también en madera. Una bonita mesa con las sillas a juego, a las cuales se les han incorporado cojines para una mayor comodidad, con unos estampados y colores similares a los cojines del sofá.
El elemento más sorpresivo de este diseño es un enorme colgante de estilo rústico en material trenzado que, además de decorar, aporta una iluminación suave y envolvente para disfrutar de este espacio en veladas inolvidables.
La segunda propuesta resulta igual de encantadora y acogedora que la primera, pero aquí la madera deja paso a algunos toques de negro, que no por ello lo hacen menos cálido.
En la zona del salón, la posición del sofá se ha invertido y el rincón se ha situado en la parte más alejada del comedor. De esta forma, ambas zonas están más conectadas y el espacio parece más grande. Aquí los muebles utilizados son de líneas más limpias, también de madera, pero con las patas en negro. Los cojines que componen el sofá también son de color claro y también está salpicado por cojines en tonos algo más vivos, pero igual de elegantes.
También se ha delimitado la zona con una alfombra exterior, pero en este caso, el color liso en crema ha sido sustituido por un estampado geométrico que combina el color blanco con el negro. Aquí también se ha colocado una mesa de centro que conjunta perfectamente con el sofá en estilo y forma.
Esta zona de relax se remata con una bonita lámpara de pie exterior con pantalla que aporta iluminación suave a esta parte de la terraza.
La zona del comedor es quizás la que más diferencias tiene con la otra propuesta. Se ha usado una mesa de madera, pero que destaca sobre todo por sus patas de metal en negro. Un color usado también para unas preciosas sillas con las patas de madera y el asiento y el respaldo de cuerda en negro, a las que también les acompañan unos cojines para hacerlas más cómodas, pero en tono liso.
Sobre la mesa del comedor se han colgado un par de colgantes de fibras naturales, también en tono oscuro, conjuntando así la combinación de madera y negro predominante en todo el proyecto.
Dos propuestas diferentes, ambas con un resultado espectacular. Tú, ¿por cuál te decides? ¿Eres más de tener un espacio cálido y acogedor repleto de madera o prefieres una zona más moderna con toques en negro? Sea cual sea tu elección te aseguramos que en cualquiera de los dos jardines podrás vivir momentos mágicos y crearás recuerdos extraordinarios.
