Aquí abajo te damos algunas ideas para multiplicar su capacidad por 2 recurriendo a algunos accesorios de pequeño almacenaje y, además, 6 tips para que coloques todas tus cosas evitando que se genere ruido visual.
Unos cestos metálicos bajo las baldas de la cocina. En la cocina, puedes sustituir alguno de los muebles altos por baldas para conseguir una mayor sensación de amplitud sin perder espacio de almacenaje. Puedes colgar de ellas unos cestos metálicos en los que colocar las frutas y verduras u ordenar las bolsitas de las infusiones a granel. ¡Por cierto! Ten en cuenta que todo lo que coloques cerca de la zona de cocción queda expuesto a posibles salpicaduras, así es que coloca en esa zona objetos que puedan limpiarse fácilmente.
Ganchos para tazas en el office. Si tienes baldas vistas en el office, coloca en una de ellas un soporte para tazas. Tienen forma de pinza y solo tienes que deslizarlo hacia el fondo del estante. Algunos de ellos llevan un pequeño tornillo con el que fijarlo a la balda, pero también los hay sin él. Antes de colocar las tazas, asegúrate del peso que puede aguantar.
Cestos de mimbre para cosméticos. En el baño, coloca las toallas bien dobladas sobre las baldas: los textiles generan sensación de calidez, aportan color y textura. Junto a ellas, coloca uno o dos cestitos de mimbre en el que organizar los cosméticos que te guste tener más a mano. Quedan súper bien las botellas reutilizables de cristal y con dosificador, especialmente si todas son de la misma colección.
Ganchos cuelga-bolsos en el recibidor. Cuelga unos ganchos a modo de percha bajo una balda del recibidor. No solo tendrás una superficie de soporte en la que dejar algunos objetos pequeños al llegar a casa, sino que aprovecharás también la parte inferior para dejar el bolso de diario, las mochilas de los peques, etc.
Selecciona los objetos que estarán a la vista con mimo. Recuerda que es muy importante que todo lo que tengas en casa -y, muy especialmente, cuando quedan a la vista- tengan valor y signifiquen algo para ti.
Lo menos bonito y las cosas peques, en cajas. Hazte con alguna caja bonita y en un tono neutro para guardar todas esas cosas que necesitas tener a mano pero que generan ruido visual.
No las sobrecargues. Deja que los objetos respiren: el espacio se verá más ligero y ordenado.
Reparte el peso: distribuye los objetos más pesados a lo largo de la balda para generar sensación de equilibrio.
Coloca un único objeto decorativo en cada balda: de esta forma evitarás saturar la vista creando varios focos de atención.
Un toque de verde. Pon alguna plantita colgante: te ayudará a purificar el ambiente, a darle un toque fresco y bonito al espacio de almacenaje.