En una sociedad cada vez más concienciada por el cuidado del medioambiente y la sostenibilidad es normal que estilos como el Japandi adquieran más adeptos. Es un estilo que aboga por el uso de materiales naturales y sostenibles, como la madera, el bambú y las fibras naturales. Materiales que aportan mucha calidez y textura a cualquier decoración, al tiempo que fomentan un entorno sostenible.
Ese contacto con lo natural también está presente con la presencia de plantas en su decoración, que le aportan mucha frescura y color al diseño.
Los tejidos usados también son naturales, como el lino o el algodón, que también ayudan a conseguir esa ligereza y fluidez del espacio, tan propia del Japandi.
Una apuesta por la sostenibilidad que también va acompañada de elementos artesanales realizados con arcillas y cerámicas. Jarrones, vasijas o platos hechos a manos, en los que sus posibles defectos también son bienvenidos.
El Japandi se caracteriza por una decoración en la que predominan los tonos neutros y claros, pero alejados de esos blancos impolutos. Su calidez llega de la mano de colores terrosos que van de la crema más clara al marrón más oscuro. Unos tonos que pueden combinarse con colores como el verde salvia, el azul grisáceo o una terracota, para añadir algo de profundidad al diseño.
Respecto a los tonos de las maderas, estas pueden ser claras, para conseguir ese efecto de luminosidad, o maderas muy oscuras para enfatizar un contraste muy elegante.
Al Japandi le gusta la simplicidad. No quieres espacios atiborrados de objetos y muebles. Lo suyo son los lugares despejados, casi vacíos, en los que las piezas y los muebles elegidos destacan por su sencillez.
Los muebles deben tener una línea depurada, sin ornamentos, pero que al tiempo sean muy funcionales. A poder ser, con doble función, como en el estilo escandinavo. Esos muebles con almacenaje escondido o esos sofás que se convierten en cama, son ideales para el Japnadi.
Esos muebles, además de ser de materiales naturales sostenibles, también deben ser de gran calidad para que puedan perdurar en el tiempo. Al Japandi no le gusta estar cambiando de elementos cada poco tiempo. Su decoración es perdurable y duradera en el tiempo.
Con el Japandi conseguirás espacios relajados, tranquilos y equilibrados. Por eso, la iluminación de cada estancia debe ser suave y cálida, alejada de luces directas y frías. Se busca una iluminación que sea más bien tenue y acogedora. Y para conseguirla, las lámparas de papel o de madera son perfectas. De esas que matizan la luz creando ambientes y atmósferas muy agradables.
Pero también son bienvenidas esas lámparas de diseño que decoran por sí solas cualquier rincón. Lámparas de líneas sencillas en un metal mate, por ejemplo, que ayuden a elevar la elegancia de cualquier espacio.
Por todas estas razones, el Japandi se ha convertido en uno de los estilos más en boga de este 2025. Su fusión cultural no solo proporciona belleza estética, sino bienestar emocional. Sus espacios son tan equilibrados y calmados que ayudan a descansar y recargar las pilas. Además, es una de las apuestas más sostenibles. Algo muy necesario para nuestro planeta.